La plataforma online, impulsada por 14 socios desde Binéfar (Huesca), facilita la conexión entre vendedores y compradores para cerrar operaciones de compra-venta a través de un sistema de lotes y subastas.
Ganaderos que quieren vender ganado porcino (animales de engorde, lechones para engordar, cerdas no productivas o berracos para genética) y compradores interesados (mataderos, salas de despiece, empresas cárnicas o productores, entre otros) en esta cabaña porcina, ya tienen una nueva forma para cerrar acuerdos de compra-venta a través de Mercopig. La página web acaba de comenzar su andadura con el fin de casar más fácilmente oferta y demanda en el sector porcino y, además, hacerlo a través de Internet, siguiendo la tendencia de la digitalización y del alza de las ventas online y los ecommerce.
En el caso de aceptar alguna oferta, “se recibe la puja y se cierra la subasta. Se hace el contrato de compra-venta de animales vivos. Se emplea la firma digital y, tras ella, entran en contacto para hacer la transacción”, explica Xavier Sarri, portavoz de Mercopig a elEconomista
El precio en la plataforma se fija sobre el de lonja, que es la referencia, aunque el vendedor puede poner el que considere. “No se pretende sustituir a las lonjas, que tienen su función de fijar precio. Mercopig puede ser orientativo para ver por dónde se mueven los precios en el mercado”.
Las operaciones se realizan con seguridad puesto que, al darse de alta, se solicita al vendedor información de la granja de la que proceden los animales o el registro de la explotación, entre otra información. De cara al comprador, la plataforma le otorga un riesgo según un informe de una casa de seguros. “Cuando un vendedor pone un lote a la venta, se pone un riesgo mínimo a asumir y tenemos controles para que no haya impagos”. Además, el lote puede abonarse a través de diferentes formas de pago, por ejemplo, confirming, teniendo el comprador que aceptar la forma de abono.
Mercopig también presta atención a la seguridad y sanidad animal. “Se pueden subir fotos y el vendedor tiene que manifestar la situación sanitaria del lote (vacunas obligatorias, estado sanitario de las granjas…) y se incluye en el contrato que, si hay una enfermedad que sale posterior, el vendedor tiene que asumir su responsabilidad”.
La plataforma cuenta ya con usuarios procedentes de Aragón, Cataluña, Valencia y Sevilla, aunque el objetivo es seguir llegar a todas las comunidades autónomas para facilitar las transacciones en toda España. El transporte de la cabaña porcina, en principio, es asumido por el comprador.
El sistema de Mercopig abre un nuevo camino a comprar y vender ganado frente a la operativa convencional o el cierre de operaciones por teléfono. “Creemos que puede ser un canal alternativo. No vamos a sustituir el mercado porcino porque están las relaciones tradicionales cliente-proveedor. Es un mercado alternativo para ciertos lotes o tener información más fluida del mercado porque a veces no se sabe que se necesitan lechones y, sin embargo, otros ganaderos quieren vender. Puede ser útil”.
Mercopig está impulsada por un total de 14 socios de diferentes sectores de actividad, incluido el porcino, que empezaron a pensar y gestar esta iniciativa en el grupo BNI Huesca Conexión. La sede de la plataforma, que se constituyó oficialmente en diciembre del año pasado, está en Tamarite de la Litera, Huesca.
Font: El Economista